Luz equinocial en Yuso

Yuso

El rayo de sol que marca la llegada de la estación primaveral faltó a su cita puntual en el monasterio de Yuso

JOSÉ DEL PON | PERIÓDICO LA RIOJA

Llegó la primavera, pero nos quedamos sin el rayo de sol. La expectación no era mucha, el prior de Yuso, Juan Ángel Nieto, un fraile del monasterio y un matrimonio alojado en la Hostería. Otros años acudían puntuales a la cita los alumnos de la Universidad de la Experiencia, o los del Plus Ultra, pero este año apenas cinco personas han celebrado la llegada de la primavera en San Millán.

Siempre puntual a la cita el rayo de sol debería penetrar por el óculo de la iglesia del monasterio de abajo y con un haz traspasar el círculo que remata la puerta del trascoro rococó de la iglesia monástica hasta dibujar un círculo perfecto en la vertical de la rejería realizada por Sebastián de Medina en el siglo XVII. Pero este año la luz falló y una nube perturbó la celebración equinoccial.

Este efecto lumínico, muy extendido en el Camino de Santiago, de la alineación con el sol de la primavera tenía su explicación en el caso emilianense, en la celebración benedictina del fallecimiento del santo fundador de la Orden acaecido el 21 de marzo del 547.

Otros cuentan cómo los arquitectos buscaban la alineación del templo con el eje Este-Oeste en la perfecta sincronía con el nacimiento del Sol de Oriente, como se conocía a Cristo, y en la simbología de la colocación del altar del sacrificio eucarístico en el punto donde resurge el sol cada mañana, cual resurrección esperada en el Apocalipsis relatado por san Juan.

Sea como fuere este año, y eso que la iglesia se aprestaba a ello una vez restaurada y rehabilitada, nos quedamos compuestos y sin sol a la espera de que el equinoccio del otoño marque la línea a seguir por los hombres entre el Cielo y la Tierra.